Entiende mi piel
Dermatitis Atópica Preguntas y Respuestas
La dermatitis atópica es una afección compleja en la que intervienen varios factores que la desencadenan, incluida la susceptibilidad del paciente y los factores ambientales.
Entiende mi piel
La dermatitis atópica es una afección compleja en la que intervienen varios factores que la desencadenan, incluida la susceptibilidad del paciente y los factores ambientales.
La dermatitis atópica es una afección compleja en la que intervienen varios factores que la desencadenan, incluida la susceptibilidad del paciente y los factores ambientales.
Los pacientes suelen mostrar cambios en la barrera cutánea y reacciones inflamatorias.
Los factores ambientales incluyen: contacto con cosméticos, jabones, detergentes y cualquier otro químico aplicado a la piel, exposición a alérgenos e infección con ciertas bacterias y virus.
¡La dermatitis atópica NO es contagiosa!
Si. La dermatitis atópica tiende a transmitirse por línea hereditaria. Si uno o ambos padres tienen dermatitis atópica, es más probable que los niños la desarrollen. Además, alrededor de un tercio de los niños con dermatitis atópica desarrollarán asma y / u otros tipos de alergias.
La dermatitis atópica afecta a ambos sexos por igual.
La dermatitis atópica ocurre durante los primeros meses de vida de un niño, tiene una evolución crónica y está fuertemente influenciada por factores ambientales. La piel atópica se caracteriza por una sequedad persistente y un picor que puede resultar insoportable. La capa superficial de la piel no realiza su función de defensa porque no es integral ni a nivel estructural ni funcional, lo que permite que los alérgenos y microbios penetren en las capas más profundas. Estos factores desencadenan un proceso inflamatorio que se manifiesta por erupciones cutáneas y lesiones por raspaduras (rasguños) debido al picor.
La dermatitis atópica puede afectar cualquier parte de la piel, incluida la cara, pero las áreas más comúnmente afectadas son las áreas de flexión, garganta y cuello.
La piel afectada suele estar enrojecida y seca, y los rasguños (acompañados de sangrado) son frecuentes. Cuando la dermatitis atópica está activa, pueden aparecer vesículas líquidas en la piel que, después de romperse, pueden causar grietas en la piel con riesgo de infecciones bacterianas o virales.
Debido a su piel muy seca, los bebés comienzan a rascarse, frotarse contra los pañales y los objetos que los rodean, y rápidamente desarrollan cicatrices rojas húmedas en las mejillas, la garganta y las áreas redondeadas de las manos y los pies. El picor provoca inquietud, llanto incontrolable y alteraciones del sueño. Muchos también pueden tener trastornos digestivos (cólicos, vómitos, diarrea) debido a las diversas alergias alimentarias que pueden desarrollar.
Si bien la causa de la dermatitis atópica es genética y está estrechamente relacionada con la calidad de la capa superficial de la piel, puede desencadenarse y mantenerse por el contacto con diversos factores, como el humo del cigarrillo en bebés con padres fumadores, polen, mildiú, pelo de animal, temperatura y diversos alimentos, estrés, dentición, infecciones bacterianas, infecciones virales, etc. La explicación es que tanto la capa externa de la capa de células lipídicas como la filagrina, la proteína que forma el cemento entre las células, se ven afectadas, y los alérgenos o otros patógenos penetran.
La dermatitis atópica tiene varias características definitorias, incluida la edad de aparición. Suele presentarse en los primeros meses de vida, con picor y piel muy seca. El diagnóstico lo realiza un especialista y es imperativo que el bebé sea atendido por un médico.
No, no se puede curar, pero hay muchas formas de controlarlo. En la adolescencia, la mayoría de los pacientes han mejorado la calidad de la piel y rara vez presentan inflamación aguda, pero la piel permanece seca; razón por la cual deben evitarse los factores irritantes enumerados anteriormente.
¡SÍ, DEFINITIVAMENTE SÍ!
Puede vivir una vida plena, incluidos los deportes, la natación y los viajes. Solo tienes que adaptarte y tener siempre los emolientes a mano: en la escuela, en el trabajo o en los viajes.
La limpieza requiere productos especiales sin conservantes, colorantes y fragancias que podrían ser perjudiciales para la capa lipídica de la piel. El uso incorrecto de antisépticos puede irritar la piel y agravar la afección. Los antisépticos no deben usarse de manera continua, ya que esto puede causar un secado excesivo de la piel. Se utilizan emolientes especiales, y en los estadios avanzados de la enfermedad se utilizan preparados farmacológicos como corticosteroides o inmunomoduladores, pero solo con prescripción médica.